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Empresas

Global66 se mete a competirles a los bancos locales con una tarjeta débito que no cobra comisión

Tomás Bercovich, cofundador y CEO de la fintech de origen chileno, anunció lanzamientos de nuevos productos en entrevista con el 1. Habilitará enlace para pagos internacionales.

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“No tengas todos los huevos en la misma canasta”, es la gran conclusión que le deja la debacle del Silicon Valley Bank a Tomás Bercovich, CEO y cofundador del neobanco Global66. En entrevista con el 1, el emprendedor de uno de los jugadores emergentes del ecosistema fintech latinoamericano analiza el fenómeno que estremece al sector bancario, anuncia el lanzamiento de una tarjeta débito que no cobrará comisiones, en alianza con Mastercard. Además, se alistan a competir en pagos internacionales mediante un nuevo sistema.

¿De qué se trata su modelo?

Global66 nace con el fin de impactar realmente la vida de las personas. Creemos que las personas en Latinoamérica, y las empresas, la gran mayoría tienen dificultad de acceder al sistema financiero. Hay mucha fricción, costos altos, costos poco justos. Además, las personas y las empresa hoy en día tendemos a ser globales. Decidimos construir el primer neobanco global de Latinoamérica, para darles a las personas y empresas un trato justo, una manera sencilla y simple de acceder al mercado financiero a precios que sean razonables y transparentes.

¿En qué se diferencia su servicio de los bancos tradicionales?

Global66 ofrece una cuenta global, que permite tanto a personas como empresas operar de manera local y global. Las personas tendíamos a nacer y morir en el mismo lugar, hace unos pocos años atrás. Hoy día, todos, o la gran mayoría, consumimos algún servicio global. Compramos en Amazon, AliExpress, o usamos Netflix, Spotify, o viajamos algunos. Otros van a vivir a otros países, ya sea porque tienen que emigrar de ciertos países, o  porque lo quieren hacer por iniciativa, porque quieren estudiar en otra parte.

¿Qué necesidad vieron en el mercado?

Las personas tendemos a ser globales. El problema es que hoy día el sistema financiero no está diseñado para esas personas. El sistema financiero está diseñado para personas locales. Y lo mismo con las empresas. Antes las empresas eran locales. La gran mayoría de nuestros padres, abuelos, bisabuelos, pertenecían a empresas locales. Hoy, una persona funda una startup e inmediatamente quiere que su empresa sea global. Se quiere ir a México, a EE.UU., quiere vender en distintos países. El problema, de nuevo, es que el sistema financiero no está diseñado para darles servicios de verdad, de calidad, a empresas que quieren ser globales.

¿Y cómo apuntan a resolver esto?

En Global66 diseñamos esta oportunidad, este neobanco global, para personas y empresas. Qué ofrecemos en la práctica: transferencias internacionales a más de 65 países. Si alguien quiere hacer una transferencia a Estados Unidos, a otro país de Latinoamérica, a Europa, a Australia, Asia, lo puede hacer con Global66 de manera digital, simple y en muy pocos minutos. Ofrecemos la opción de enviar y recibir dinero de manera instantánea entre usuarios Global66, en el mismo país y en la misma moneda, o en otro país en otra moneda.

¿Cómo funciona en la práctica?

Por ejemplo, yo que soy chileno, te puedo estar mandando a ti una transferencia absolutamente instantánea, y el dinero te llega a tu billetera, a tu cuenta, en pesos colombianos de manera inmediata. O a tu cuenta en dólares, o a la moneda que yo te quiera enviar o tu quieras recibir. Ofrecemos además esta cuenta global con cuentas en diferentes monedas. Tú tienes una cuenta en pesos colombianos; pero puedes tener además una cuenta en dólares, una cuenta en pesos chilenos, en soles peruanos, en peso mexicano; en varias monedas de Latinoamérica, además de dólares y euros, que son monedas muy importantes para nosotros los latinoamericanos, porque se nos devalúa la moneda constantemente. Tenemos una opción de estar comprando de manera instantánea, con un click, dólares o euros. La gracia de estos dólares es que son reales, son digitales; están en tu cuenta digital, pero son de verdad. No son una criptomoneda, un stablecoin, que ya estamos viendo que las stablecoins no son tan stable, porque esa paridad dejó de existir el fin de semana pasado. La gracia es que son dólares de verdad.

¿Y cómo se ajustan a la normativa local?

Global66 es una empresa regulada en Colombia bajo la Superintendencia Financiera, con todo lo que eso implica a nivel de procesos de seguridad para nuestros clientes al fin y al cabo.

¿Qué innovaciones preparan?

Lanzamos un link de pago internacional para que empresas o personas freelancer puedan vender en toda Latinoamérica. Yo solo comparto un link por Whatsapp o por mail, y una persona me puede pagar, una empresa, en moneda local en cinco países de Latinoamérica. En Chile, Perú, Colombia, México y Argentina. Solo con un link de pago.

¿Qué diferencia a la tarjeta que están anunciando?

Estamos lanzando esta semana nuestra tarjeta Global66 Mastercard, que es una tarjeta de débito que tiene una gran ventaja contra cualquier otra tarjeta en el mercado. Tiene cero comisión. Muchas instituciones financieras cobran acá hasta 5% de comisión por usar la tarjeta. Además ofrecemos cero costo de tipo de cambio. La gran mayoría de instituciones financieras además de cobrarte una comisión, te cobran un tipo de cambio spread frente al tipo de cambio, que está oculto. Muchas veces no sabes, si no te metes a Google o a Bloomberg a mirar exactamente cómo está el tipo de cambio en ese minuto; la gran mayoría de instituciones financieras te están poniendo un costo adicional ahí que no te lo transparentan. La tarjeta de Global66 tiene cero comisión y cero costo en el tipo de cambio.

¿Qué falta para que estos métodos que ustedes presentan compitan con grandes jugadores, como por ejemplo Paypal?

Que empresas como Global66 se regulen y cumplan las de la ley, como las grandes empresas en el mundo financiero. Global66 lleva solo cuatro años en el mercado y ya tenemos regulaciones o partners regulados en todos los mercados que operamos. Y eso es muy costoso de implementar en términos de costo; literal, en dinero, tiempo, esfuerzo del equipo de obtener una regulación, mantener una regulación. Necesitamos que la industria fintech o alternativa a los actores tradicionales sean vistos como empresas seguras. Por eso en Global66 desde muy temprano empezamos a invertir y a trabajar en esta regulación. Lo segundo, es tiempo. Las instituciones financieras tradicionales, o una empresa como Paypal que nació hace probablemente 20 años atrás, requieren tiempo llegar a que la adopción sea masiva. Que las personas lo conozcan, que las empresas lo conozcan, y lo empiecen a utilizar y entiendan que funciona.

¿Cuál ha sido el recorrido en el camino de convertirse en neobanco?

Levantamos nuestra primera ronda de inversión en 2019, que fue de US$4 millones, o un poco más. Con inversionistas latinoamericanos, family offices e inversionistas ángeles; y también un fondo de Inglaterra, y algunos inversionistas ángeles de allá. Y luego levantamos nuestra seria A en 2020, cuando participaron tres fondos de Estados Unidos y uno de UK. A la fecha, hemos levantado más de US$20 millones. Y creo que lo más importante, más allá de los hitos de levantamiento de capital, porque el dinero es un medio, no es el fin en sí mismo, es que hoy día hemos construido una compañía que tiene un modelo de negocio, que tiene ingresos relevantes, que está en break even. Es sustentable, no necesita vivir del dinero de inversionistas, como muchas startups que crecieron en los últimos años a punta de regalarles cosas a los clientes, o quemar plata en Facebook y Google para crecer y crecer, sin realmente entender dónde estaba el modelo de negocio.

¿Los afectó la caída del Silicon Valley Bank? ¿Qué lecciones se desprenden de este caso?

Gracias a Dios no estuvimos afectados porque no teníamos dinero en Silicon Valley Bank. Nuestra matriz está en Inglaterra y tenemos dinero en los bancos más grandes de allá, y bancos muy importantes de Latinoamérica también. No nos vimos afectados, como primera cosa, por suerte. Estaba este seguro del Fdic (Federal Deposit Insurance Corporation) que iba hasta los US$250.000. Si tú tenías una cuenta hasta US$250.000, este seguro te pagaba todo. Lo que salió a decir el gobierno de Estados Unidos es que les va a pagar a todos, independiente del tope. Es decir, si tú tenías o tu empresa, US$1 millón, igual de alguna manera u otra vas a recibir tu US$1 millón. El gran aprendizaje de cara a los emprendedores, a los founders y a las personas en general es algo bien básico que nos cuentan a muchos desde pequeño, y es: no tengas todos los huevos en una misma canasta. No dejes todo tu dinero en un solo banco, en una sola institución, sino que, de alguna manera, reparte tus huevos. En más profundidad, es tratar de entender dónde están los dineros de los bancos y con qué institución financiera uno está operando. Aquí si uno hacía el doble click, que pocos lo hacían, probablemente había decisiones que tomaron que no eran las más lógicas. Tener más de la mitad de los depósitos de un banco en herramientas financieras de largo plazo, que no se pueden liquidar en el corto plazo, no es lo óptimo. Uno debería tener, como institución financiera, la plata, sobre todo de los clientes, sus depósitos, en instrumentos muy líquidos. Que en el minuto que el cliente lo quiera rescatar, allí está su dinero para entregárselo. El principal mensaje es no tener todos los huevos dentro de la misma canasta. Y operar con instituciones que confían y que le hacen un buen due diligence, que tú entiendes cómo operan, dónde tienen sus dineros.

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