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Enel Colombia recibió alrededor de 4.000 denuncias por hurto de energía

Enel Colombia ha recibido alrededor de 4.000 denuncias por hurto de energía en Bogotá y Cundinamarca durante el año 2022.

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Francesco Bertoli, Gerente General de Enel en Colombia

En el transcurso del año 2022, Enel Colombia registró un preocupante aumento en las denuncias por hurto de energía en la región de Bogotá y Cundinamarca. Según las cifras proporcionadas por la compañía, se recibieron aproximadamente 4.000 denuncias relacionadas con esta práctica ilegal.

Estas denuncias revelan la magnitud del problema y la necesidad de abordar de manera urgente esta situación. Durante el año pasado, el hurto de energía representó un total de 230 GWh/año, lo que equivale al consumo mínimo vital de energía eléctrica de Chía, Zipaquirá y Cajicá durante un año en Colombia, aproximadamente 145.000 hogares. Estas cifras muestran las graves consecuencias económicas y sociales que este delito conlleva.

El robo de energía es considerado un delito y está sujeto a sanciones legales. Según el artículo 256 del Código Penal Colombiano – Ley 599 de 2000, aquellos que sean encontrados culpables pueden enfrentar multas que oscilan entre 1,33 y 150 salarios mínimos mensuales legales vigentes, así como penas de prisión que van desde los 16 hasta los 72 meses.

Además de las consecuencias legales, la manipulación ilegal de las redes de energía genera condiciones de inseguridad para las comunidades. Estas acciones pueden desencadenar sobrecargas en los circuitos y afectar la calidad del servicio eléctrico para todos los clientes del sector en el cual se materializa el hurto.

En lo que va de 2023, las denuncias por hurto de energía continúan siendo alarmantes. Se han reportado alrededor de 1.250 denuncias, lo que demuestra que esta práctica ilegal persiste en la región. Los casos de hurto de energía se han identificado tanto en predios comerciales como industriales, así como en algunas zonas residenciales. Las modalidades utilizadas por los infractores van desde la alteración de los medidores hasta la conexión directa a los postes de energía con el objetivo de evadir la medición.

En Bogotá, las pérdidas de cableado, los accidentes por electrocución y las interrupciones del servicio debido al robo de energía son problemas recurrentes, especialmente en localidades como Bosa, Kennedy, Fontibón, Usme, Ciudad Bolívar, Barrios Unidos y Suba. Por otro lado, en Cundinamarca, los municipios más afectados por este delito incluyen Soacha, Zipaquirá, Madrid, Funza, Ubaté, Facatativá, Girardot, Flandes, Silvania y Fusagasugá.

Ante esta preocupante situación, Enel Colombia hace un llamado a los habitantes de Bogotá y Cundinamarca para que denuncien este tipo de hechos delictivos, ya que afectan a toda la cadena de usuarios. Estas conexiones ilegales no solo desestabilizan el sistema de energía y ponen en riesgo la seguridad de los clientes, sino que también pueden ocasionar fluctuaciones en el suministro eléctrico, incendios en los hogares, daños irreversibles en los electrodomésticos e incluso un aumento en el costo de las facturas de energía. Además, aquellos que cometen el hurto de energía se exponen a riesgos para su vida e integridad física, ya que la manipulación de las redes eléctricas conlleva el peligro de recibir descargas eléctricas.

Francesco Bertoli, Gerente General de Enel Grids en Colombia, enfatiza la importancia de reducir y erradicar el hurto de energía para preservar la seguridad de los clientes y la infraestructura. La compañía ha tomado acciones legales contra los responsables de este delito.

En cuanto a las sentencias por hurto de energía, hasta la fecha se han dictado 149 sentencias que confirman la comisión del delito y se han impuesto sanciones a los culpables. Además, Enel Colombia ha interpuesto otras 279 acciones legales por robo de energía, las cuales se encuentran en proceso. Es importante destacar que el delito de defraudación de fluidos, según el Código Penal.

Entre las sentencias emitidas, se destaca el caso de una industria de plásticos que estaba conectada directamente a la red, y el propietario de dicha fábrica fue condenado a 2 años de prisión.

Enel Colombia hace un llamado a la ciudadanía para que denuncie estas prácticas ilegales con el fin de preservar la integridad y seguridad de los ciudadanos, así como el buen funcionamiento y la confiabilidad de la red de energía eléctrica. Las denuncias se pueden realizar de manera anónima a través de la línea telefónica de Enel Colombia: 601 5140000 para Bogotá y Cundinamarca.

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