El rey Felipe VI pide vencer el desánimo ante la crisis y elude el caso de su padre
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Felipe VI hizo un llamado a los españoles a emprender un “gran esfuerzo nacional” con el fin de vencer “el desánimo y la desconfianza” generadas por la pandemia y remontar de la crisis económica.
En medio de la expectativa generada por su mensaje televisado por lo que pudiera decir de su padre, el rey centró el grueso de la alocución desde el Palacio de la Zarzuela en insuflar esperanza a la ciudadanía para afrontar la recuperación con “esfuerzo, unión y solidaridad, con todos y para todos“.
“Ni el virus, ni la crisis económica nos van a doblegar“, proclamó el monarca, quien añadió: “No somos un pueblo que se rinda o que se resigne en los malos tiempos“.
A pesar de admitir que la situación es “grave“, que las circunstancias son “verdaderamente excepcionales” y que “no va a ser nada fácil” la reconstrucción, se muestra “convencido” de que España saldrá adelante.
El año que ahora acaba ha sido “muy duro y difícil“, según Felipe VI, por lo que ha estimado comprensible que “el desánimo o la desconfianza” estén muy presentes en muchos hogares.
En especial, donde hay “un vacío imposible” por los fallecidos por el COVID-19, unos 50.000, según el Ministerio de Sanidad.
Sin embargo, sostiene que la salida “no puede venir de la mano de más desánimo o de más desconfianza“.
La llegada de la vacuna representa una “gran esperanza“, pero el jefe del Estado demanda a los ciudadanos mantenerse “prevenidos y no bajar la guardia” al ser “imprescindible” la responsabilidad individual.
“Así lo he entendido siempre, en teoría con mis convicciones, con la forma de entender mis responsabilidades como jefe del Estado y con el espíritu renovador que inspira mi reinado desde el primer día“, añadió el rey Felipe VI para diferenciar su etapa de la de su padre.
El mensaje venía también precedido de las críticas a la Corona de Unidas Podemos y del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias.
Felipe VI se ha reivindicado como un rey que está “con todos y para todos“.