¿Por qué dice el Dane que el desempleo bajó?
#SinCarreta | Lo cierto es que detrás de las frías estadísticas y la aparente reducción del desempleo en junio, lo que hay es una gran masa de personas en la informalidad, que en el país representan más de la mitad de quienes hoy se encuentran ocupados.
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Por primera vez en cuatro años, en junio la Tasa Nacional de Desempleo en Colombia estuvo por debajo del 10 %. Y aunque la cifra se presenta como un avance importante, todavía hay más de 2.3 millones de personas en la angustiosa situación de no tener trabajo.
José Contreras, es un joven de 21 años que tardó varios meses buscando empleo, hasta que lo consiguió en un local de comidas rápidas en Bogotá. Sin embargo, a los pocos días fue despedido, según él, por su orientación sexual. Ahora, sentado en una banca del Parque de Lourdes en Chapinero, cuenta con preocupación que no sabe cómo va a subsistir, pues los ahorros ya se le están acabando.
Una ciudadana venezolana que trabaja como vendedora ambulante en ese mismo lugar dice que cada vez es más difícil encontrar un empleo estable, por lo que tuvo que dedicarse a la venta de tinto y snacks frente a la iglesia, aprovechando la presencia de feligreses.
Según el DANE, cinco de cada 10 trabajadores en Colombia está en condición de informalidad. Mejor dicho, en el popular “rebusque”, como se le conoce a quienes se ven obligados a dedicarse a tareas en las que no reciben prestaciones sociales, ni tienen derecho a vacaciones remuneradas y mucho menos cotizar para pensión.
Muchas de las personas que se encuentran sin trabajo acuden a las agencias de empleo de las cajas de compensación para recibir orientación sobre cómo realizar una búsqueda eficaz. Diana Martínez, psicóloga y orientadora de Compensar, cuenta que en esta agencia los aspirantes a un puesto reciben incluso capacitación y asesoría en aspectos como la elaboración de la hoja de vida y pautas para atender una entrevista laboral.
Por otro lado, Julián Monsalve es otro joven desempleado que acudió a este servicio para tratar de ubicarse laboralmente, pero antes había enviado más de 30 hojas de vida a empresas que ofrecían vacantes, sin tener éxito.
Entre tanto, en otra agencia de empleo de Colsubsidio, Angie Jiménez, una de las funcionarias que atiende a diario estos casos, cuenta que muchas personas acuden para cobrar el subsidio al desempleo, que otorga hasta $1.700.000 a quienes han perdido su empleo, siempre y cuando cumplan con haber estado afiliadas al menos un año, entre otros requisitos.
Hasta junio de este año, el desempleo bajó a 9,3 %, según el DANE. Esto representa que más de 400.000 personas dejaron de ser desempleadas en el último mes, de acuerdo con las cifras oficiales.
Aparentemente, el mayor dinamismo en sectores como la administración pública, los servicios profesionales, el transporte, las actividades artísticas, el negocio del alojamiento y el comercio, explica el que se haya generado más empleo.
Lo cierto es que detrás de las frías estadísticas y la aparente reducción del desempleo en junio, lo que hay es una gran masa de personas en la informalidad, que en el país representan más de la mitad de quienes hoy se encuentran ocupados.